El Centro Recordatorio del Holocausto de Uruguay agradece la conmovedora carta de docente y alumnos del Colegio y Liceo Bet-el
Estimados Rita, Sandra y Jaime:
Desde lo más profundo de mi corazón quiero darles: ¡¡¡Gracias!!!
La vida nos sorprende gratamente cuando en el camino de nuestras actividades profesionales y docentes, encontramos gente tan amable, dispuesta y preparada como ustedes.
La visita del contador Zarucki a nuestra aula y la salida didáctica al Centro Recordatorio del Holocausto del Uruguay- Museo de la Shoá, han superado nuestras expectativas.
Siempre he considerado a Israel un país especial, el reloj del Altísimo, y a su pueblo un tesoro de alto valor, aún el desierto florece para él, de la mano de nuestro fuerte Dios.
Ha quedado en mi mente: “LA FUERTE RESISTENCIA” en la Shoá, resistencia a través de la música, a través del amor, de la perseverancia, de la esperanza, de la oración, del canto, una capacidad extraordinaria de resistir la fatiga del cuerpo y del alma y eso hizo que lo que se planeaba como un exterminio terminara siendo la prueba de la resistencia sobrenatural de todos los hijos de mujer judía.
Es cierto que hubo pérdidas, pero también sobrevivientes, hubo dolor, pero también gozo en aquellos que lograron sobrevivir, y hoy una memoria para enseñarnos a todos nosotros.
Les admiramos por tanta apertura y respeto, aún siendo los docentes visitantes, seguidores de Jesús, a quien consideramos el Hijo enviado de Dios, nos han abierto las puertas con tanta respetabilidad y dignidad, enriqueciendo al estudiantado con datos tan relevantes sumado a una extraordinaria interacción que se produjo entre ustedes y los chicos, todo esto quedará en nuestro recuerdo, no hay nada para desechar y todo para atesorar.
Me queda la imagen tuya, Rita y la de Sandra, puestas de pie sobre la escalinata, con los brazos extendidos, dándonos la bienvenida, llevo en mi memoria las valiosas piezas del museo, la línea del tiempo, y un sinfín de cosas más.
Uno de los estudiantes, Alejo Cabrera escribió:
Hace menos de una semana tuve el privilegio de visitar el museo de la Shoá en Montevideo, experimentando el recibimiento grato que nos dieron y el conocimiento que nos compartieron para no repetir el error y para honrar a los fallecidos de la Shoá. El tema se habla muy seguido en nuestra clase, pero esta visita nos acercó más a lo vivido con las experiencias de los familiares de Rita y Sandra, a las cuales agradezco mucho por habernos recibido y tratado con tanta amabilidad. Justo en estos momentos en Educación Social y Cívica estudiamos los DDHH, vemos que éstos son inviolables, pero en esta tragedia se violaron todos los derechos humanos. Las experiencias vividas en el museo son únicas, me encantaría volver a vivir la experiencia de visitarlos por lo amable que fueron con nosotros.
La clase en su plenitud ha considerado esta salida didáctica: digna de ser conservada en la memoria.
Una vez más: ¡Gracias!
Seguiremos en contacto.
¡Shalom!
Dra. Prof. Álvarez Torres.-