Luego de meses de coordinación finalmente el Pastor Eduardo Vignoli logró reunir a sus niños y visitó con su Congregación Evangélica al Museo de la Shoá y como se lo había propuesto se logró que hubiera un sobreviviente en la visita: Sylvio Packer. Nuevamente Sylvio brindó su testimonio por la memoria y para educar y nuevamente impactó a todos los presentes. A continuación el Pastor pronunció palabras que nos conmovieron muchísimo por lo cual le solicitamos las plasmara en un artículo para compartir, así como también las palabras de la guía didáctica Sandra Veinstein.

Una nueva visita memorable al Museo de la Shoá, Uruguay

Por Sandra Veinstein

El 18 de junio tuve el placer de ser testigo y protagonista del encuentro de niños, jóvenes y adultos de la Iglesia Evangélica liderada por el Pastor Eduardo Vignoli quienes concurrieron a la actividad planificada en el Museo de la Shoá, por la Prof. Rita Vinocur.
En primer lugar tuvimos el honor escuchar al Sr. Silvio Packer, sobreviviente de la Shoá, quien con gran entrega relató las atrocidades, despojos y deshumanización que tuvo que vivir  urante
la Segunda Guerra Mundial. Pude observar la escucha atenta y comprometida de todos los presentes. Posteriormente la Prof. Rita Vinocur relató parte de la historia de su madre Ana Benkel de Vinocur(Z”L). Al finalizar la exposición el Pastor se dirigió especialmente a las personas judías que estaban allí presentes. Sus palabras nos emocionaron profundamente y fue un momento que quedará grabado en nuestros corazones.
El encuentro terminó con la visita guiada al Museo. Durante el recorrido observé a los jóvenes atentos a mis explicaciones y emocionados por los relatos de los acontecimientos que debieron pasar las víctimas. Al finalizar la que terminó emocionada fui yo al recibir sus palabras de infinito agradecimiento y la bendición de ellos a mi persona.
Me fui a mi casa con una sensación muy especial, de sentirme plena y con la impresión de creer que mi “misión”, como hija de sobreviviente, mujer judía, madre, esposa en definitiva ser humano se estaba cumpliendo.

Reconocimiento del Pr. Eduardo Vignoli

Por Pr. Eduardo Vignoli Ayestarán

¿Quién es un judío?

El jueves 18 de junio próximo pasado pudimos visitar el Museo del Holocausto y posteriormente el Memorial, con un grupo de 30 chicos pertenecientes a varias congregaciones de la Iglesia Evangélica Asamblea de Dios en Toledo.

Sueño largamente esperado, pero concretado al fin, para unirnos aún más, a nuestros amados hermanos mayores, los judíos.

Allí en la Kehilá, en la Sinagoga, nos encontramos con personas que han impactado la vida de los chicos, y por qué no, las de los maestros que les acompañaron y la mía también.

Rita Vinocur y Sandra Veinstein, con su amabilidad y simpatía, y la familia Packer, Silvio, un sobreviviente del Holocausto,su esposa Aída y su hija Beatriz, contándonos de las terribles experiencias de Silvio en los Campos de Exterminio, y de cómo pudo sobrevivir en las peores condiciones y luego de la guerra, venir al Uruguay y formar una preciosa familia compuesta por numerosos integrantes.

Contestaron inquietas preguntas de los chicos y en un ambiente sobrecogedor y lleno de una presencia inefable, tuvimos un encuentro maravilloso que nos ayudará por el resto de nuestras vidas.

La vida del pueblo de Israel, desde el Tanaj, la Biblia, la Diáspora de casi 20 siglos con sus innumerables historias, pogrom sincluídos, la vida de los judíos en Uruguay han sido una fuente de inspiración y fe para toda nuestras numerosas congregaciones a lo largo y ancho del país. Voz de Sión en el Uruguay y Semanario Hebreo han sido mis amigos desde mi juventud. Gracias Iero.

Y así, hemos sido motivados a amar, respetar y honrar al Pueblo elegido de D-os, a quién tanto le debemos.

En un momento del encuentro, Rita preguntó a los chicos si le podían decir ¿Quién es un judío? Y luego de varios no es esto ni aquello, nos mencionó que un judío es el salido de un vientre judío y que se siente unido a ese pueblo inquebrantablemente. También por conversión y por sensación de pertenencia.

Antes de retirarnos de la Sinagoga, para pasar al Museo, les pedí me permitieran expresar mi concepto sobre ¿Quién es un judío?

Durante mi vida en varias ocasiones me he encontrado con personas que no estaban seguras de ser judías y lo que ello significaba, así que luego de indagar un poco, les he podido explicar y convencer que eran judíos y que debían estar muy contentos, agradecidos y orgullosos de serlo.

Un judío es aquella persona que forma parte del pueblo elegido de D-os para transmitir la presencia, la palabra y la salvación de Él a todo el mundo. El judío es el inicio y el final, es y será cabeza y no cola, no importando donde estén, ya sea en Auschwitz, donde triunfó la vida sobre la muerte, en Uruguay o donde sea.

Hay una promesa en el Tanaj, en Bereshit, Génesis 12:2-3, en la Biblia que usamos donde D-os le dice a un arameo errante: “Y haré de tiuna nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. Bendeciré a los que te bendijeren y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las naciones de la tierra.”

Por lo tanto nosotros les amamos querido Pueblo de Israel, queremos seguir sus pisadas y ejemplos. D-os es indestructible, la Biblia es indestructible y el judío es indestructible, por eso tantos sobrevivieron, por esa fuerza invisible que llevan dentro.

Un amigo mío, judío, me decía “Tú dices que somos el pueblo elegido”, pero “qué caro que nos ha costado esa elección”. Y es verdad, ha costado caro, pero cuando otros pueblos ya no están, el pueblo judío sigue impactando a la humanidad. Siguen vivos, siguen en pie, siendo y dando ejemplo de vida.

Hemos sido enseñados y aprendimos a gozarnos con Israel y con cada judío en cualquier parte del mundo en que esté. También a amarles, respetarles y honrarles.

Yo no puedo ser judío aunque quisiera, Uds. que lo son siéntanse bendecidos por ello y disfruten de esa condición inigualable.

La humanidad entera y todo el mundo, tenemos mucho que agradecerle al Pueblo de D-os.

Muchas gracias por esta magnífica oportunidad de estrechar los lazos de amor divino que nos han brindado. Un abrazo. Lejaim.Brajot. Leitraot. Shalom.