Por Isac Gliksberg. Publicado en Semanario Hebreo el 11 de Agosto de 2016.

El silencio triste del fallecimiento ha acallado, la voz del “Lerer” (Maestro) Isaac Przetycki (Z”L).

El pasado martes 02 de agosto fue el día de la gran pérdida no solamente para su familia, su esposa, sus hijas, sus yernos y sus nietos, sino también, para la colectividad judía de Uruguay.

Sin desmedro de las difíciles etapas de su vida que tuvo que sortear, desde muy jovencito, Przetycki tuvo una gran fortaleza espiritual e intelectual que supo volcar a todos sus alumnos y amigos.

Isaac Przetycki había nacido hace más de noventa años en el “shtetl” (villorrio) polaco Brok, a cien kilómetros de la capital Varsovia y cerca de Byalistock.

Desde niño, en su Brok natal concurrió a dos escuelas, y desde los ocho años de edad, asistía a los encuentros del “Bund” (Partido Socialista judío) de su shtetl. Allí aprendió literatura judía y, ya con edad más avanzada, aprendió allí política y economía de los movimientos socialistas mundiales adquiriendo, de este modo, una formación intelectual universal y un amplio conocimiento.

Al estallar la Segunda Guerra Mundial, Isaac y su padre, su madre y sus hermanos, hicieron más de mil doscientos kilómetros a pie, de día y de noche, llevando consigo lo imprescindible y lo que podían transportar, para refugiarse en lo que es hoy Rusia. Allí trabajó de día en un Banco y de noche concurría a clases de Enseñanza Secundaria y, más tarde, cuando los nazis invadieron Rusia, fue por su preparación intelectual Oficial del Ejército Rojo y fue movilizado para trabajar, para reparar caminos.

Terminada la guerra, volvió a Polonia. Un hermano suyo que ya vivía en Uruguay desde antes de la guerra mundial, trajo a Isaac con su madre y otros dos hermanos. Llegaron a Uruguay el 21 de octubre de 1947.

Su padre había muerto en Rusia, en los Urales, donde apareció congelado en la nieve.

Para Isaac Przetycki comenzó en Uruguay una nueva vida. Desde 1948 fue Maestro en la Escuela judía conocida en Montevideo como “Escuela Judía del Centro” y que a partir de 1950 siguió funcionando en el actual Palacio Dr. Jaime Zhitlovsky.

Przetycki trabajó como Maestro y Director de esa Escuela durante doce años, hasta 1959. Simultáneamente, dictó cursos nocturnos de idioma idish, literatura idish y cultura judía nacional y cultura universal, para jóvenes y no tan jóvenes que, por diversas razones o por su edad, ya no podían concurrir a la escuela judía, dirigía la sección infantil en idish, conocida como “Kinder Fraint”(“El amigo de los niños”) de un diario judío en idioma idish que en aquellos años se editaba y distribuía en Montevideo, dirigió una sección cultural en CX30 Radio Nacional que se emitía los domingos de mañana, donde hacía participar a sus alumnos de la Escuela y de los cursos nocturnos.

Además de dirigir la Escuela del Centro (que desde 1950 se llamó escuela Zhitlovsky), dictó allí clases curriculares de mañana y de tarde, desde el Segundo año hasta el Quinto año.

Cientos de niños judíos de Montevideo, de las más diversas generaciones, fueron sus alumnos.

Con el correr de los años nunca permaneció inactivo ni trabajó solo para él.

Durante unos cuantos años fue Consejero de la Comunidad Israelita del Uruguay (“Kehilá) y, fue durante su actividad en esta institución que el Maestro Przetycki creó, y dirigió, el primer “Club de Idioma Idish” que funcionó y sigue funcionando en la Kehilá.

Fue Secretario de la Organización “Bund” y de la Asociación Cultural “Itzjok Leibush Peretz” durante décadas hasta su cierre definitivo hace no muchos años atrás.

Fue Profesor de idioma y literatura idish y de historia judía nacional y universal.

Ejerció el periodismo en idish y fue en tal sentido corresponsal del “Forwerts” de Estados U. de América, y de ediciones en idish de Israel.

En Montevideo, escribió para la revista en idish “Do” (“Aquí”) que dirigía y editaba el inolvidable Shamai Grinberg y fue un activo colaborador periodístico de “SEMANARIO HEBREO” con reportajes, ensayos y crítica literaria e histórica y amigo personal de nuestro fundador y Director José Jerozolimski (Z”L).

Quien ésto escribe fue su alumno en la Escuela Judía del Centro desde los ocho años de edad hasta el quinto año escolar y es su amigo desde entonces hasta su fallecimiento.

Seguramente, desde donde esté en la actualidad, seguirá observándonos y guiándonos, a quienes fuimos sus alumnos, para expandir los campos del judaísmo, del idioma idish y de la cultura y la historia judía que él nos ha dejado.