Reflexiones del Magíster Ronald Trenchi sobre su visita al Memorial del Holocausto de Miami

Reflexiones del Magíster Ronald Trenchi sobre su visita al Memorial del Holocausto de Miami
10 marzo, 2023 administrador

Amor y angustia: Memorial del Holocausto en Miami

Escribe el Magíster Ronald Trenchi, miembro de la Comisión Directiva del Centro Recordatorio del Holocausto de Uruguay

¿Como recordar el Holocausto? ¿Cómo representar y trasmitir lo irrepresentable?

En las décadas posteriores al Holocausto estas fueron algunas de las preguntas que sobrevivientes, académicos, artistas y gobiernos, se plantearon a la hora de diseñar museos y memoriales recordatorios.
Según, el académico James E. Young la memoria del Holocausto es un continuo flujo entre un espacio tanto para la memoria de la destrucción pasada, como para la vida presente y su regeneración. Young reflexiona que el objetivo de un memorial es
“no consolar sino provocar…no ser ignorado por su transeúnte sino exigir interacción…”.
Por lo tanto, los memoriales tienen múltiples facetas, homenajear a los seis millones de judíos asesinados, así como educar e incentivar a la ciudadanía a actuar ante formas contemporáneas de antisemitismo y cualquier tipo de discriminación.
En los últimos años tuve la oportunidad de conocer diversos memoriales y museos. Entre ellos el Memorial de la Shoá en París, el Memorial del Holocausto en Berlín y el Monumento del Holocausto en Ámsterdam. Estos se encuentran localizados en las regiones de origen de las víctimas y donde el horror del Holocausto se ejecutó.
Los memoriales expresan con diversos estilos un lugar de recuerdo a las víctimas y el recordatorio continuo del horror del Holocausto. En las últimas décadas del siglo XX, museos y memoriales fueron inaugurados en países como Argentina, Canadá, Estados Unidos, Israel y Uruguay, donde los sobrevivientes del Holocausto se establecieron después de 1945.

Recientemente visité el Memorial del Holocausto en Miami Beach, Estados Unidos. Miami una ciudad que comúnmente es asociada con el turismo, sin embargo, es un lugar significativo para recordar las víctimas del Holocausto. La región del sur de la Florida y en particular Miami es después de Nueva York y Los Ángeles la ciudad en Estados Unidos con mayor cantidad de sobrevivientes del Holocausto.

En la década de 1980 cuando comenzó la iniciativa para construir el memorial, vivían en el área de Miami aproximadamente entre 20 mil y 25 mil sobrevivientes.

En 1984 un grupo de sobrevivientes, a pesar de algunas voces críticas que consideraban que no era el lugar apropiado, lograron que la ciudad de Miami Beach aprobara la creación del memorial y les fuera otorgada la locación donde construirlo.

Las tierras concedidas se localizan en una dirección que su numeración tiene un gran significado, el 1933-1945 de Meridian Avenue. Número que coincide con las fechas del Holocausto perpetrado por el régimen nazi.

La persona encargada para el diseño y construcción del memorial fue el arquitecto y escultor Kenneth Treister.

Treister tenía como objetivo crear un sitio donde los sobrevivientes pueden visitar para honrar la memoria de sus familiares; y por otra parte expresar el horror del Holocausto para que las nuevas generaciones nunca olviden lo sucedido.

La construcción del memorial demando 5 años y el mismo fue diseñado artesanalmente con piedra de Jerusalén, bronce y granito.

El memorial fue inaugurado en 1990 con la presencia del sobreviviente del Holocausto Elie Wiesel, el cual expresó:

Mira su cara. Mira todas las caras. Mira y te darás cuenta de que existía un sufrimiento que trascendía al sufrimiento. ¡Ay de nosotros, porque la tragedia que este museo está tratando de integrar está más allá de las palabras y más allá de la imaginación, pero no más allá de la memoria!

El memorial está diseñado como un jardín de esculturas, compuesto de diversas secciones, buscando generar una experiencia emocional y sensorial en los visitantes.
El comienzo del memorial es marcado por una escultura de una madre protegiendo a sus hijos. A continuación, se accede al primer mural donde se explica cómo era la vida judía en Europa, el ascenso del nazismo y las leyes de Nuremberg, los ghettos, el proceso de deportación, la resistencia, los campos de exterminio, la liberación y la vida posterior de los sobrevivientes. El mural expone una serie de imágenes y textos que con crudeza muestra la destrucción de las comunidades judías por parte de los nazis.
Al finalizar este primer mural, se encuentra la sección de esculturas del memorial.
Para acceder a la isla de esculturas, se ingresa a una bóveda que su parte superior, incluye la identificación que los nazis obligaban a utilizar a los judíos para estigmatizarlos y segregarlos. El arquitecto del memorial diseño un túnel que conecta la bóveda con las esculturas. En las paredes del túnel están identificados los campos de exterminio y se escucha un audio con voces de niños tristes cantando. El diseño del túnel, la perspectiva y poca luz, provoca opresión y angustia en el visitante. Al aproximarse al final del túnel aumenta el sonido de la música y se divisa una escultura de una niña pequeña expresando desolación. La salida del túnel da lugar a las esculturas.
El centro del memorial es una escultura de un brazo y mano de 12 metros de alto que se proyecta hacia el cielo. La mano tiene tatuado un número como los prisioneros en los campos de concentración. En la sección del brazo se identifican múltiples esculturas de tamaño real que representan a hombres, mujeres y niños víctimas del Holocausto, subiendo hacia el cielo intentado escapar. Las figuras demacradas, expresan terror y angustia. Sin embargo, es posible también interpretar gestos de amor; mujeres y hombres protegiendo a sus hijos. El escultor Kenneth Treister, ante esta conjunción de emociones en las esculturas decidió nombrar esta sección del memorial como esculturas de amor y angustia.
Al salir de la sección de las esculturas, el memorial tiene una última sección.
El mural memorial con los nombres de las víctimas del Holocausto. Finalmente, se llega a una última escultura que representa la mujer y niños del inicio del memorial, pero en esta ocasión muertos.
Considero que el memorial del Holocausto en Miami Beach intenta expresar a través del arte y el diseño arquitectónico el horror que sufrieron las víctimas y sobrevivientes. Al mismo tiempo las esculturas interactúan expresando amor por sus familiares. El memorial trasmite diversas emociones, lo que lleva al visitante a una continua reflexión sobre como el odio del régimen nazi destruyo la vida de seis millones de personas. También es claro como busca trasmitir la importancia de luchar contra el antisemitismo y cualquier discriminación. El memorial también expresa que la inacción y silencio de parte del mundo, sirvió como cómplice del Holocausto.

Esto último es especialmente relevante, ya que el número de sobrevivientes del Holocausto es cada vez menor y análisis de opinión publica indican que en múltiples países existe un alarmante desconocimiento sobre lo que sucedió entre 1933 y 1945, combinado con un creciente antisemitismo. Ante esto es vital el rol de los memoriales y museos, honrando a las víctimas y educando a las nuevas generaciones sobre el horror del Holocausto.

El memorial de Miami Beach con su impacto emocional contribuye a la memoria.-